HOMENAJE A MI MADRE

Flora Hernández

Escribir es una arte porque te permite expresar con palabras sencillas sentimientos, emociones, pensamientos, para contar historias, anécdotas y servir de experiencias a otros que al igual que tú han vivido situaciones similares.

Hoy es el Día de las madres, y esta fecha siempre ha sido especial, porque es un tributo a todas las madres, a esas mujeres que se dedican en cuerpo y alma a sus hijos, bien sea propios o no. 

Ser madre es un Don, pero también una Bendición, eso lo aprendí de mi mamá Flora Hernández, quien falleció hace un año y 6 meses, pero que en mi corazón, parece que fue ayer. Aún escucho sus pasos, lentos acompañado del sonido de su bastón (taqui, taqui) o algo así, cuando estaba aquí en la casa. Es que era una fiesta cada vez que me visitaba y se quedaba en la casa. Su hobbie leer y ver televisión "El canal de las estrellas", o TV Familia "El Padre Yepez o a Douglas Buenaño".

Después de la muerte de mi papá Julio César Piñango, nuestra vida cambió porque nuestro Super Héroe no estaba, pero quedó ella, la que nos acompañaba, aconsejaba y a mi personalmente me controlaba, porque aunque los que me conocen me ven alegre, tengo un carácter algo difícil y nunca me callo nada, cuando regaños me llevé, por eso, de Ella aprendí la Prudencia.

Una madre es un tesoro y a Dios gracia, tengo que agradecer a la vida, porque hasta el final estuve a su lado, intentando hacerle la vida alegre y plena. Cuánto le debo a mi mamá, lo principal la Vida, porque de una madre depende el vivir, también le debo mis Valores, porque si no los tuviera claro, cuántas cosas no hubiera hecho, aprendí a Perdonar y a ser Justa, de no ser así, albergaría en mi vida el rencor, la Fe en Dios que es la que me ha sostenido toda la vida, porque siempre he sido una persona con problemas de salud.

Mi mami siempre tenía la mirada triste, y yo le preguntaba el porque, me contestaba que cuando uno pierde a su mamá la vida cambia, hoy la entiendo. Pero en medio de ese dolor que nunca más se separa de ti, vivimos rodeado de Alegría, mi niñez o nuestra niñez y vida estuvo rodeado de música, alegría, fiestas, celebraciones culturales y sobre todo con un alto valor Familiar, porque la Familia Hernández, mis tíos, mis primos, todos éramos uno y disfrutamos estar siempre juntos.

Si les cuentos parte de esta historia es porque no hay palabras que alcancen para describir lo que significa una Madre, por eso los poemas y canciones, las flores y los regalos, los homenajes, las oraciones y aún así nos es suficiente para describir lo infinito que es el Amor de Madre. Por esto, les escribo a quienes las tienen viva, ámenlas, respétenlas, acompañala, cuídenla y si tienes rencor por alguna mala acción del pasado, no la juzgue, nadie conoce las circunstancia que las llevó a proceder como lo hizo. Pero, quien no las tiene viva como es mi caso, valora lo aprendido, honrala (Ex. 20:12)  con tus acciones, para que perdure por siempre su legado y las generaciones que siguen puedan seguir su ejemplo.

Hoy dedico este homenaje a mi madre, pero también a todas las madres del mundo, Dios nos dió el Don de dar vida a otros y este privilegio hay que Celebrarlo y Vivirlo con Intensidad, mi mensaje a las jóvenes, ustedes vivan su tiempo, porque en la vida para todo hay tiempo (Ec 3, 1-15), no es bueno abortar, porque el dolor de una pérdida no se supera, te acostumbras y sigues, pero prevalece allí. Madres, cuiden a sus hijos, con ese amor que nace de lo profundo de su corazón, con la certeza que Dios te acompañará para que siempre tomes la mejor decisión si se lo pides. (Prov. 22, 6)

Feliz Día mamita allá en cielo, Feliz Día a todas las madres del mundo.

Flor Piñango
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